Hoy, los gobiernos representados en las Naciones Unidas (ONU) han aprobado prácticamente por unanimidad un Tratado sobre el Comercio de Armas que prohibirá a los Estados transferir armas convencionales a otros países si saben que van a ser utilizadas para cometer genocidio, crímenes de lesa humanidad o crímenes de guerra o facilitar su comisión.

Este año para conmemorar el día 25 de noviembre, Día Internacional de Eliminación de la Violencia contra la Mujer desde el Movimiento por la Paz hemos trabajado las fortalezas de las mujeres frente a esa violencia.

No usan armas, la mayoría no reciben pago, muchos no han ido a la escuela o la universidad, no cuentan con seguridad social, servicio de salud o riesgos profesionales y sin importar la edad, estos colombianos y colombianas entregan hasta su propia vida por defender sus derechos, los de su comunidad y los de grupos sociales. Son hombres y mujeres que desarrollan una labor heroica por su país y sus comunidades, son constructores de paz y dinamizadores de la democracia.

El 20 de junio se conmemora el Día Mundial del Refugiado como una expresión de solidaridad, sensibilización y responsabilidad con todas las personas refugiadas. Según datos del ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para el Refugiado), actualmente hay más de 45 millones de personas refugiadas, desplazadas y/o apátridas en el mundo. De ellas, aproximadamente la mitad son desplazadas internas, desarraigadas dentro de sus propios países.

Maria Ester, María Coj, Fermina, Yolanda, Francisca, Ángela y doña Berta, mujeres del grupo de teatro de Las Poderosas, junto con Hada, responsable de proyectos del Movimiento por la Paz en Guatemala, y Cristina, responsable de Comunicación en Guatemala, participaron en esta entrevista colectiva en Facebook por el Día Internacional de la Mujer.

El Relator Especial de Naciones Unidas sobre Racismo, Mutuma Ruteere, visitó ayer la ciudad de Melilla, donde ha mantenido una reunión con un grupo de organizaciones sociales presentes en la ciudad autónoma. El acto, organizado por el Movimiento por la Paz -MPDL-, partía con el objetivo de ofrecer al enviado de Naciones Unidas información de primera mano sobre la situación en materia de racismo y xenofobia en Melilla.