¿Por qué conmemorar el Día de la Paz?

Los días internacionales sirven de marco para la reflexión, la visibilidad y la denuncia de los problemas que afectan a nuestras sociedades. Por Francisca Sauquillo


En la antesala del 21 de septiembre, Día Internacional de la Paz, quiero escribir unas líneas sobre por qué conmemorarlo, por qué poner el foco en la Paz, por qué salir a la calle a reclamarla, por qué es tan importante que entre todas y todos seamos conscientes de cómo su ausencia afecta a nuestras vidas. Porque la Paz es mucho más que la ausencia de guerra. La Paz es igualdad, derechos humanos y justicia social, en nuestras calles, barrios, ciudades y pueblos.

El mundo de hoy hace frente a crisis económicas, institucionales, territoriales, políticas y demográficas; y a 12 conflictos bélicos en África y Oriente Medio - Siria, Yemen, Libia, Irak, Líbano, Somalia, Eritrea, Sudán, Mali, Nigeria, Afganistán o Costa de Marfil-, guerras que no son de baja intensidad, son conflictos que no sólo desplazan población masivamente sino que destruyen su tejido económico, político y social como país.

El proyecto europeo, además, debe afrontar profundos cambios, en este año en que se ha celebrado el 60º aniversario del Tratado de Roma. La cuestionada respuesta de Europa a la crisis económica y el alejamiento de la ciudadanía han profundizado a su vez en una crisis política e institucional. Su tibia respuesta a los desafíos globales también ha resaltado su fragilidad. La llegada de refugiados que abandonan sus hogares como consecuencia de conflictos armados, violaciones de derechos humanos o crisis económicas y humanitarias, perdiendo y arriesgando sus vidas por llegar a Europa es probablemente la más clara. La Unión Europea y sus Estados miembros deben cumplir sus compromisos de acogida e incidir en las causas que hacen que las personas se vean obligadas a migrar para intentar tener una vida digna en los países de origen.

En muchos de esos Estados miembro, incluyendo España, la crisis económica ha acrecentado la pobreza, la desigualdad, la exclusión social y la pérdida de derechos. Y en una sociedad en la que no hay derechos no hay igualdad, y sin igualdad no hay paz.

¿Y nos preguntamos por qué reclamar Paz y por qué conmemorar el Día de la Paz?