Por la construcción de una verdadera Cultura de Paz

Por la construcción de una verdadera Cultura de Paz

En un contexto internacional marcado por la violencia, desde el Movimiento por la Paz reivindicamos el respeto de los Derechos Humanos y la Cultura de Paz como herramientas para alcanzar una PAZ, en mayúsculas, que sea mucho más que la mera ausencia de guerra y que garantice la convivencia pacífica entre pueblos y personas.


El próximo 21 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Paz, una fecha declarada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1981 “para conmemorar y fortalecer los ideales de Paz en cada nación y cada pueblo”.

Unos ideales preocupantemente debilitados si lanzamos una mirada al panorama internacional actual. Conflictos armados, terrorismo, delitos de odio, persecución, pobreza y exclusión socioeconómica,… representan todas ellas formas de violencia que a diario sufren millones de personas en todo el mundo, impidiendo su legítimo desarrollo y, por tanto, la construcción de sociedades donde la justicia social y la igualdad de oportunidades sean una realidad.

Especialmente grave es la situación por la que atraviesan los más de 65 millones de personas que, según ACNUR, se han visto obligadas a abandonar sus hogares a causa de los conflictos, la persecución o las violaciones de derechos humanos. A esa cifra hay que añadirle los millones de personas que, por cuestiones económicas o de otra índole, buscan un futuro mejor lejos de sus lugares de origen.

En el Movimiento por la Paz creemos firmemente que los derechos y la vida de esas personas deben prevalecer sobre las fronteras. Solo en 2015 más de 5.000 personas murieron ahogadas en todo el mundo, según la OIM. De ellas, casi 3.000 perdieron sus vidas en el Mediterráneo. Un dato que hace patente la necesidad de redoblar los esfuerzos políticos, económicos y humanitarios para salvaguardar la vida de las personas ofreciendo formas seguras y legales de alcanzar una vida mejor.

Por todo ello, desde el Movimiento por la Paz hacemos un llamamiento a todos los gobiernos, instituciones, organizaciones, así como a todas las personas, para que trabajen en la construcción de una verdadera Cultura de Paz. Solo de esta manera podremos aspirar a vivir en un mundo donde se asegure el respeto de los Derechos Humanos, la justicia social y la igualdad de oportunidades.

Hoy es el Día de la Paz, pero la Paz no es solo cosa de un día…

Desde el Movimiento por la Paz aspiramos a una sociedad donde la prosperidad sea sostenible y compartida, y donde la participación, la escucha y el diálogo sean los medios para alcanzar nuestras metas. En definitiva, aspiramos a alcanzar una verdadera Cultura de Paz.

Con motivo del Día Internacional de la Paz, desde Movimiento por la Paz queremos invitar a la sociedad a conocer nuestra organización, que trabaja desde hace más de 30 años en la defensa de los Derechos Humanos, tanto de la población refugiada y migrante como de otros colectivos en situación de vulnerabilidad.

En el ámbito internacional, trabajamos en Oriente Próximo (Líbano, Jordania, Territorios Ocupados de Palestina), en África (Marruecos, campamentos de refugiados saharauis, Malí y Níger) y en América Latina (Guatemala, Nicaragua, Colombia y Cuba).

En España, trabajamos con colectivos en riesgo de exclusión social, como jóvenes, mujeres, refugiadas e inmigrantes para asegurar su igualdad de oportunidades en temas como el acceso a un empleo, a la educación o al asesoramiento jurídico.

Pequeños gestos con gran significado

En Movimiento por la Paz sabemos que los pequeños gestos, tanto de ciudadanos y ciudadanas como de empresas comprometidas, son fundamentales para seguir defendiendo los Derechos Humanos y avanzar en la construcción de una sociedad en PAZ.

Por eso, coincidiendo con el Día Internacional de la Paz, desde el Movimiento por la Paz lanzamos una iniciativa de microdonaciones a través de la cual pretendemos recaudar fondos para el mantenimiento de una clínica móvil para personas refugiadas sirias con discapacidad en Líbano.

El objetivo es recaudar 2.870 € con los que poder seguir atendiendo al mes a 60 personas con discapacidad extrema que, debido a su situación de extrema necesidad, no pueden desplazarse a los Centros de Rehabilitación puestos en marcha por el Movimiento por la Paz, con lo que es preciso realizar atenciones a domicilio.