El Movimiento por la Paz –MPDL- quiere expresar su satisfacción ante el anuncio realizado ayer por los presidentes de Cuba y EE. UU. en relación a la normalización de las relaciones diplomáticas y económicas entre ambos países.

Las medidas anunciadas ayer por ambos mandatarios, que incluyen la liberación de presos por ambas partes, la finalización del sistema de sanciones y bloqueo económico de la isla o la apertura de una embajada estadounidense en La Habana, suponen el punto de partida a un nuevo periodo en las relaciones entre ambos países, marcadas por la tensión y la beligerancia durante los últimos 53 años.

Desde el Movimiento por la Paz creemos que la decisión adoptada por los Gobiernos de Washington y La Habana representa un esperanzador paso adelante en la construcción de una comunidad internacional regida por valores como la cooperación, el entendimiento y la resolución pacífica de las diferencias y los conflictos entre las naciones y los pueblos.

Asimismo, deseamos que el establecimiento de relaciones entre ambos Estados signifique el levantamiento del embargo y el bloqueo económico a la isla y que contribuya de forma real a mejorar el bienestar y el acceso a derechos de la población cubana, sometida durante largos años a unas difíciles condiciones de vida que han limitado sus aspiraciones de progreso social y económico.

El Movimiento por la Paz trabaja ininterrumpidamente en Cuba desde 1993 en proyectos de mejora de las condiciones de vida de comunidades vulnerables. La defensa de la seguridad alimentaria de la población, la mejora de la respuesta ante catástrofes naturales, la dotación en infraestructuras y el desarrollo local constituyen algunas de nuestras líneas de trabajo tanto en zonas urbanas como rurales de la isla.

En la actualidad, el Movimiento por la Paz está llevando a cabo tres proyectos con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID), el Ayuntamiento de Barcelona y la Embajada de Japón.