Aprobada la nueva Ley del Voluntariado: un paso en la buena dirección

Aprobada la nueva Ley del Voluntariado: un paso en la buena dirección

Ante la aprobación de la nueva Ley de Voluntariado, que viene a sustituir a la anterior reglamentación, del año 1996, desde el Movimiento por la Paz queremos mostrar nuestra satisfacción por la aprobación de una norma necesaria que supone un avance claro en la regulación de numerosos aspectos relacionados con el voluntariado como derecho y forma de participación ciudadana.


En primer lugar, consideramos que el proceso seguido para la elaboración de la Ley ha sido plenamente participativo, con la participación de una amplia representación de actores de la sociedad civil, lo que ha tenido como resultado una Ley fruto del consenso que goza de una amplia legitimidad social e institucional.

Por otro lado, consideramos que el propio contenido de la Ley viene a definir, estructurar, ordenar y regular toda una serie de ámbitos del voluntariado, como derecho y como práctica, hasta ahora inexistentes en la legislación vigente. Entre las cuestiones más relevantes del nuevo texto, desde el Movimiento por la Paz destacamos las siguientes:

  • La nueva Ley ofrece un espacio abierto y flexible en la concepción de un voluntariado de acción y de transformación social, que diferencia entre voluntariado y acciones de buena vecindad. Se actualiza recogiendo normativas y tratados europeos  para, partiendo de la realidad actual de las entidades de voluntariado, abrir el paso a la evolución que el fenómeno del voluntariado pueda tener en los próximos años.
  • Define las dimensiones y valores del voluntariado.
  • Define el concepto de entidades de voluntariado.
  • Define el papel a desempeñar por parte de los diversos agentes que pueden intervenir en el voluntariado: Administración Pública, entidades sociales, empresas, universidad pública, escuelas e instituciones educativas.
  • Incluye un capítulo en el que se desarrollan de forma específica los derechos y deberes de las personas voluntarias y de las personas beneficiarias de la acción voluntaria.

Desde el Movimiento por la Paz consideramos, por tanto, que esta nueva Ley representa un importante paso en la buena dirección que, no obstante, ha de ser reforzado para incluir en el desarrollo reglamentario de la Ley cuestiones de especial relevancia no tratados en ella, como pueden ser el voluntariado internacional, el rol del sector empresarial en el voluntariado o la educación y formación en este ámbito.