A menudo, las personas con discapacidad sufren numerosas formas de rechazo. No disponen de las mismas oportunidades para acceder al sistema educativo, al mercado laboral, etc. La estigmatización social a la que son sometidas se convierte en una forma de violencia estructural. No obstante, muchas cosas han ido cambiando progresivamente gracias a los proyectos del Movimiento por la Paz y la comunidad ha adquirido conciencia de que este colectivo debe tener las mismas oportunidades que cualquier otro vecino del pueblo.

Tahani Al FataftahTrabajadora de Rehabilitación Comunitaria en Tarqumia (Cisjordania)