Una vez superada la crisis humanitaria provocada por el Mitch, las intervenciones se enfocaron en la construcción de sistemas de agua potable; el desarrollo y fortalecimiento de la comercialización campesina; el apoyo a la seguridad alimentaria de familias rurales;  la puesta en marcha de programas educativos integrales de rehabilitación y reinserción social de mujeres jóvenes; la mejora de las condiciones higiénico-sanitarias en los cascos urbanos varias comunidades y la mejora de la soberanía alimentaria, el saneamiento ambiental y la gestión local de familias rurales.

En los últimos años, se ha pretendido transversalizar en las intervenciones las temáticas de equidad de género y cambio climático.

Mediante los proyectos, el Movimiento por la Paz Nicaragua ha contribuido a que miles de mujeres y hombres mejoren sus condiciones de vida gracias a:

• El acceso a una alimentación saludable.
• El incremento del rendimiento productivo y la capacidad de gestión de los recursos naturales.
• El aumento de conocimientos y destrezas de productores y productoras jóvenes.
• Un mayor protagonismo y participación de las mujeres en los procesos productivos y de toma de decisiones.
• Mejores condiciones higiénico-sanitarias y medioambientales.
• Incremento de mujeres rurales jóvenes que acceden a la propiedad de la tierra agrícola.
• Aumento de mujeres rurales que emplean tecnologías alternativas y de adaptación al Cambio Climático para el cultivo de sus huertos.
• Incremento de recursos económicos de las mujeres.
• Fortalecimiento de comités de salud y de educación en comunidades rurales.
• Aumento de mujeres rurales que acceden a cargos de dirección y responsabilidad dentro de cooperativas agrícolas.
• Dinamización y fortalecimiento de cooperativas rurales.